En Alemania viven tres millones de turcos. Berlín y Colonia son las ciudades que tienen la mayor proporción de ciudadanos procedentes de un país que sigue luchando por lograr un sitio en la Unión Europea. La población turca impregna la imagen de la ciudad, especialmente en aquellos barrios en los que uno piensa estar en pleno Estambul. Una de esas calles, por ejemplo, es la Venloer Strasse de Colonia: pequeñas tiendas, artilugios y decoraciones poco comunes en Alemania, todo ello acompañado de un cierto desbarajuste.
No cabe duda de que la población turca es un importante factor económico del que Alemania no puede prescindir. Se ocupan de un buen sector de la gastronomía y se encuentran muy bien representados entre los trabajadores industriales, junto a las cintas mecánicas de muchas fábricas.
Al mismo tiempo, es patente la tensión entre los alemanes y los turcos, que se desenvuelve en un marco pacícfico, pero no deja de haber crispaciones. Al comenzar este año fallecieron en Ludwigshafen once turcos en un incendio. Algunos medios turcos reaccionaron inmediatamente, y sin conocimiento de causa, acusando al país de xenófobo. La investigación judicial, a la que se invitó a participar a la policía turca, concluyó que el incendio no fue provocado, sino consecuencia de un defecto técnico.
En este clima de tensión aparecieron en Colonia anuncios en turco invitando a un discurso del presidente Erdogan. Acudieron 15.000 turcos y el discurso fue naturalmente en turco. Erdogan había invitado inicialmente a Merkel a hablar con él, que aunque en un principio mostró su disposición para acudir al evento, al final rechazó la idea.
Alemania se niega rotundamente a que se den clases de Islam en los colegios públicos y mucho más si no son en alemán. Hace pocos años había muchas voces a favor de la entrada de Turquía en la Unión Europea, lo cual implica ventajas en el ámbito de la seguridad para Europa, como "válvula de control" entre el mundo occidental y el mundo islámico. Sin embargo, actualmente han desaparecido las prisas para acoger a Turquía. Mientras tanto Alemania reflexiona sobre su propia identidad, ante lo que le es desconocido.
La tensión ha crecido especialmente en Colonia con el proyecto de construir una mezquita cuyos minaretes sean tan visibles como las torres de la catedral de Colonia. Muchos católicos dicen que no están en contra de la construcción de una mezquita en Colonia, bajo la condición de que deje de estar prohibida la construcción de templos cristianos en Turquía. El cardenal de Colonia, Joachim Meisner, ha pedido al presidente Erdogan, con motivo del año jubilar de San Pablo, que construya un iglesia en Tarso. Hay que tener en cuenta que una mezquita es mucho más que un lugar de culto: es un centro comercial, un centro escolar, un lugar de recreo.
Una muestra de progreso en acercamiento de las culturas es la Universidad aleman-turca que abrirá sus aulas en Estambul en otoño de 2009. Nos encontramos ante el desafío del dialógo que requiere un intenso conocimiento mutuo que no sea ni intolerante ni ingenuo.
Comentarios
"Alemania se niega rotundamente a que se den clases de Islam en los colegios públicos y mucho más si no son en alemán", bueno, esto no es tan así... nosotros, en Mehlem, tenemos clases de religión musulmana en el colegio (educación primaria) católico de este pueblo...
:)
"Muchos católicos dicen que no están en contra de la construcción de una mezquita en Colonia, bajo la condición de que deje de estar prohibida la construcción de templos cristianos en Turquía",
el cardenal Zollitsch (presidente de la Conferencia episcopal alemana) senaló acertadamente apenas ser elegido en ese puesto que no se trata de conclucar aquí los derechos de la libertad religiosa como contrapartida porque son conculcados en otra parte.
su opinión (estoy totalmente de acuerdo con él) es la adecuada y, por otra parte, la insistente posición de Roma,
políticamente, esto está en los planes de los pro-europeos turcos, a saber, personas como Erdogan y Güh, la AKP en general;
pero no en los de los otrora avanzados laicistas ilustrados y militarizados turcos kemalistas, tan apoyados por Europa durante todo el s. 20.
Entre paréntesis, a mi modo de ver, lo que más ha ayudado al diálogo interreligioso con los musulmanes es el viaje del Papa a Istambul y también la actuación de la Virgen María en la historia,
"Una muestra de progreso en acercamiento de las culturas es la Universidad aleman-turca que abrirá sus aulas en Estambul en otoño de 2009", exacto!
esperamos la universidad turca en Alemania!
saludos José!